CUADRANTE I

Es la introversión  activa. Somos nosotros mismos íntimamente trabajando en beneficio propio. Aquì debemos adquirir, acumular, aprender a asimilar todo lo que necesitamos o creemos necesitar para existir y consolidarnos con base en el resto de posibilidades que indica la carta. Se lucha duro por dejar la marca en el mundo con la tendencia a no querer cooperar con los demás.

Su necesidad de seguridad interior esta enlazada con su  habilidad para dirigir su voluntad y actuar en los asuntos personales según lo crea conveniente. Intenta manejar su propia vida, lo que constructivamente sugerirá  confianza y seguridad en sì mismo. Pero si esta persona no encuentra formas efectivas de resolver los conflictos personales que lo mantienen en guerra consigo mismo, no lograrà administrarse. Ademàs se halla muy ligado a su interior para dejar que los demás lo guìen hacia formas màs plenas de expresar sus energìas.

El elemento ausente es el agua. El fuego simboliza el impulso vital, espontàneo de la expresión independiente. Sus intereses se centran en èl mismo, es por lo tanto una influencia egocéntrica. Entonces los planetas en este cuadrante expresan un impulso para experimentarse por si mismo a través de actividades que nacen de nuestros intereses actuales. Si la mayoría de los planetas se hallan aquí (en especial los de fuego: Sol, Marte y Jùpiter) el individuo se preocuparà excesivamente por sì mismo. Si los aspectos son difíciles el potencial narcisista crece.

Este cuadrante revelarà al individuo que se hace a sì mismo, cuya concentraciòn, intenciones y esfuerzos le permitirán  alcanzar el éxito en sus empeños de manera vital e independiente.

El único elemento que no està es el agua, que proporciona la síntesis màs profunda y la asimilación de experiencias. El agua es muy sensible a los procesos unificadores de la vida. Es un elemento universal socialmente conectivo. Su ausencia aquí implica que la psicología básica del Cuadrante enfatiza la autoconfianza y no la dependencia. Si los signos y/o planetas de agua se hallan aquí (Luna, Neptuno y Plutòn) entonces el individuo se apoya a sì mismo y primero nutre y protege sus propias necesidades, en vez de la de los demás. Todos los valores del elemento agua son dirigidos hacia el yo y son experimentados subjetivamente antes que el individuo pueda encauzarlos hacia el entorno.

Como la naturaleza del Cuadrante es la ausencia del elemento agua, entonces la persona necesita aprender a comprender y ser màs sensible con las necesidades personales ajenas y responder con màs solicitud a las condiciones externas que no dependen directamente de èl.  Inclusive su propia sensibilidad se centra sobre si mismo superficialmente, indicando que no sondea su ser con la profundidad suficiente para descubrir donde operan sus motivaciones màs sutiles. En general el Cuadrante I es màs reactivo que reflexivo. Si los conflictos de este cuadrante  crean un desequilibrio muy grande entonces las soluciones pueden hallarse en el Tercer Cuadrante.

CUADRANTE II                  

Todavìa el individuo se centra en las experiencias màs personales e internas. Sigue siendo importante la seguridad interior aunque se siente impulsado hacia una participación màs activa. Ya que se està preparando para actuar en el mundo y comienza a conocer la manera de reaccionar de los demás ante las situaciones, sus deseos, sus necesidades, su motivación es hallar seguridad personal a través de las relaciones al estilo familiar. Tiende a crear fuertes vìnculos   subjetivos con los demás, lo que lo hace màs vulnerable a los sentimientos y actitudes de las otras personas aunque no siempre sea visible externamente.

El Segundo Cuadrante necesita de las respuestas de los demás y no puede vivir en el  vacio. Su sensibilidad hacia la gente le ayudar a percibir a su propio ser con mayor profundidad. Fundamentalmente se trata de nuestra intimidad proyectada y compartida con los demás casi en secreto. Es el hogar, los hijos, la creatividad, el empleo, las enfermedades sufridas pasivamente y en lo que màs dependemos de los otros.

El elemento iniciador del Segundo Cuadrante es el agua y el elemento ausente el aire. El agua simboliza la habilidad para ser muy receptivo a la corrientes subterráneas y a los cambios sutiles. Su naturaleza instintiva opera fácilmente sondeando la disposiciòn del ànimo y la sustancia subyacente de cualquier condición ambiental. Si la mayoría de planetas se halla aquí  especialmente los de agua (Luna, Plutòn y Neptuno) el individuo será muy sensible a la naturaleza interna y menos obvia de los demás.

De ahì la habilidad para sintonizarse con las facetas de las relaciones que no son expuestas ni visibles a la superficie, o que se  encuentran aùn bajo la experiencia de un potencial no desarrollado.

El único elemento no representado en esta cuadrante es el elemento aire, que es el de la participación social y la objetividad mental. Es distintamente impersonal y desapegado en sus evaluaciones externas de la vida y  necesita distanciarse para desarrollar  una perspectiva màs amplia. Su carencia puede indicar que este Cuadrante no estimula de forma innata el desapego en su naturaleza. El énfasis en este Cuadrante implica el dominio del corazón màs que la cabeza. El calor humano, la proximidad y el compatir, las necesidades profundas, son màs importantes para el crecimiento básico del individuo que la comprensión de ideales abstractos a la libertad personal de expresión. En vez de observar la relación racionalmente desde el punto de vista no comprometido, esta persona tiende a sentirse enraizada activamente en el centro de las mismas y se identifica personalmente con su desarrollo. Una falta de motivación de aire puede indicar a algunas que no reconoce fácilmente  ni asimila los puntos de vista diferentes de los suyos sin sentirse amenazada en seguridad establecida. Deberà aprender a desarrollar una mayor tolerancia y aceptación hacia las distintas actitudes que no concuerdan necesariamente con la suya.

En general, primero busca el apoyo de los demás para alcanzar sus necesidades interiores antes de poder funcionar cómodamente  en el mundo. El opuesto es el Cuadrante IV, las tensiones y desequilibrios que se forman aquí pueden ser resueltos adoptando los valores constructivos de este cuadrante superior complementario.

CUADRANTE III

Indica la posibilidad de usar grandes estrategias en sus relaciones. Cuando este Cuadrante està màs enfatizado, el individuo expresarà un interés abierto en los asuntos del mundo que ayudan al crecimiento y al desarrollo de los demás. Se ve asì mismo como lo ven los demás. Es la parte de la vida social que compartimos con los demás, diferentes a nuestra familia.

La relaciones en su acepción màs amplia llaman su atención especialmente cuando hay énfasis en el Hemisferio Norte. Posiblemente sea el màs mundano de los Cuadrantes. El individuo suele concentrase en su relación con las realidades objetivas del medio ambiente. Es el único Cuadrante en que no se  realza el contacto con uno mismo, especialmente si la mayoría de planetas se hallan en el Hemisferio Norte.

Este Cuadrante representa al Cònyuge, los socios nuestros aliados, nuestros enemigos declarados u ocultos, nuestras ideas o convicciones religiosas, nuestra postura ante la muerte y al màs allà, lo que la vida nos da o nos arrebata sin que cuente nuestra voluntad.

Una desventaja en el énfasis de este Cuadrante es que el individuo puede quedar atrapado por los asuntos de la vida externa y no encontrar tiempo para conocerse a sì mismo particularmente si los planetas caen en las Casas VII y IX pero dado que esta la Casa VIII, se requiere de la transformación interior de los valores para crecer. Esto tendrá lugar a través de una lucha interior que nos llevarà a enfrentarnos con las exigencias de la marcha social que uno ha puesto en movimiento. Generalmente el individuo atraerà la atención pública hacia el mismo debido a sus esfuerzos y actividades externas.

El elemento básico de este Cuadrante es el aire, falta tierra. El aire que indica una perspectiva social clara y la habilidad para establecer proyectos amplios, aunque abstractos para el progreso ideal colectivo. Es el elemento de la libertad y de la propagación, busca funcionar a niveles mentales expansivos que reunan  a una multiplicidad de actividades e intereses. Una mayoría de planetas aquí, en especial los de aire (Mercurio, Venus y Urano) describirà una persona que desea ver y hacer progresar, a su comunidad y tomar conciencia de la variedad de intercambios que tienen lugar a su alrededor.

Se sentirà especialmente atraído por los esfuerzos conjuntos, por aventuras colectivas, y las alianzas comprometidas, a  menudo es el porta voz de un grupo.

Su destino en la vida se halla casi totalmente en manos del público. Puede ser elegido para cubrir las necesidades de los demás y convertirse en cierto punto en propiedad de la comunidad.

El único elemento que no esta presente es la tierra, la forma, la estructura, la consolidación, la realidad pràctica. Su falta indica que una persona debe aproximarse a sus ideales sociales de una manera màs pràctica y terrenal. Aunque los potenciales de la sociedad le interesan, deberá ser màs metódico  en su aproximación y aceptar su rutina. El desea triunfar deberá tener ambiciones razonables y realistas. Este Cuadrante se adapta, màs a la persona que gusta dar una rápida respuesta a sus problemas inmediatos y en cambio no se adecuarà bien a los temas sociales que requieren un planteamiento cuidadoso y de largo alcance. Su falta de tierra significa también que el individuo no se halla bien enraizado consigo mismo y le resulta difícil resistir las presiones y exigencias del medio externo. Es demasiado abierto y receptivo, para su propio bien. Un Cuadrante III mal manejado puede crear tensiones que se alivian con las virtudes del Cuadrante I.

CUADRANTE IV